Blog Ac Mayo
Autor para correspondencia:
MVZ. Cristina Yadira Gómez Sánchez.
A lo largo de la historia de la medicina, la vacunación ha sido la herramienta más útil para controlar numerosas enfermedades, tanto la medicina humana como la medicina veterinaria han sido testigos de la utilidad de la vacunación para prevenir enfermedades altamente prevalentes y en muchos casos, mortales.
Cuando se vacuna, se introduce al organismo un virus o bacterias que han sido modificados dentro de un laboratorio para que al aplicarlos no causen una enfermedad, pero sí que despierten al sistema inmunológico y lo preparen para combatir a este virus o bacteria en un fututo. En resumen, vacunar a nuestras mascotas es prevenirles enfermedades infecciosas y darles inmunidad (anticuerpos). Claro que esto también beneficia a la salud publica tomando en cuenta que hay numerosas infecciones zoonóticas (aquellas que pueden transmitirse entre animales y humanos).
Imagen 1 Campaña de vacunación antirrábica BIO ZOO
Cuando un perro que no ha sido vacunado contra cierta enfermedad y tiene contacto con otro ya enfermo, es muy posible que también se contagie ya que no tiene defensas contra la enfermedad, aquí radica la importancia de la vacunación, aunado a esto la vacunación otorga algo que se conoce como “inmunidad de rebaño” que consiste en inmunizar a una gran parte de cierta población contra enfermedades especificas para lograr descender la incidencia de dichas enfermedades, ya que son menos los individuos que pudieran llegar a enfermarse, lo cual aumenta mucho más la importancia de la vacunación.
Después de analizar lo importante que es la vacunación en la vida de nuestras mascotas debemos saber también cuando es importante aplicarlas.
Es muy conocido que cuando un cachorro se incorpora a nuestra familia es de suma importancia comenzar su esquema de vacunación, su esquema inicial idealmente comienza a las 6 semanas de edad y las vacunas esenciales son: parvovirus canino, distemper (moquillo), hepatitis viral canina, leptospira, rabia y adenovirus tipo II, además existen otras enfermedades que dependiendo de nuestra ubicación geográfica y estilo de vida de nuestras mascotas, el medico veterinario deberá evaluar si necesita incluirlas en el esquema de nuestro cachorro, por ejemplo: coronavirus, parainfluenza y bordetella, entre otras. Es importante aclarar que este esquema debe ser evaluado y determinado por un médico veterinario que evaluará cada paciente y sus particularidades.
Imagen 2 Un veterinario deberá establecer el esquema de vacunación
Algo muy importante es saber que para poder vacunar a un animal es importante que se encuentre clínicamente sano, esto debe determinarse mediante un examen físico – clínico mediante el cual el veterinario determinará si el animal es apto para la vacunación en ese momento, medirá todas sus constantes fisiológicas y la presencia de cualquier signo de enfermedad.
Cuando hablamos de cachorros y su primera vacunación debemos seguir todas las indicaciones que el veterinario nos dé, si acaba de llegar a nuestra familia nos dirán que debemos esperar unos días a que lleve un periodo de adaptación de 7 a 10 días antes de su primera vacunación y se procura que previamente esté desparasitado. Pero de la vacunación en cachorros hablaremos en otra ocasión, además es un tema un poco más sonado.
Sin embargo, muchas veces se cree que un perro adulto puede ya prescindir de vacunaciones y no es así, todos los perros adultos deberán de seguir siendo vacunados cada cierto tiempo después de terminar su esquema de vacunación de cachorros, en algunos países este tiempo es cada 3 años y en algunos otros cada año, depende del antígeno y condiciones especificas de cada mascota. En México y el resto de Latinoamérica el esquema de vacunación para la mayoría de las enfermedades se contempla una vacunación anual, quiere decir que cada año deberás acudir al veterinario con tu mascota para que realice una evaluación del esquema de vacunación que ha llevado durante su vida y entonces decidirá el biológico (vacuna) específico que necesita en ese momento.
Se ha llegado a pensar que la mayoría de las enfermedades sobre todo virales, como por ejemplo parvovirus o distemper, entre otras afectan únicamente a cachorros, pero nada está más lejos de la realidad, si bien es cierto que es más común que se presenten en edades tempranas, los adultos también pueden contagiarse, sobre todo en aquellos perros que cursan con alguna enfermedad crónico degenerativa que pueda debilitar su sistema inmunológico, ahora que ya sabemos esto no olvides acudir anualmente con tu perro adulto a consulta para su revisión anual y vacunación esencial.